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Trabajar con un proveedor de cualquier tipo siempre puede tener sus pros y sus contras. Encontrar a la persona que entienda tus necesidades, que trabaje como si fuera parte de tu equipo y que te haga sentir cómodo con los procesos son las cualidades más importantes.
En temas logísticos, para tener éxito trabajando con uno o más proveedores, el secreto está en mantener una postura flexible. Debe existir un gran sentido de confianza entre ambas partes. En segundo lugar, es necesario que cada uno de los involucrados en el proceso sean profesionales y accesibles. Y tercero, quizá el más importante, como mencionamos al inicio todo proceso debe ser flexible en su enfoque para asegurar el éxito.
Claro que hay otros criterios, sin embargo, es importante centrarse en la flexibilidad ya que nos enfrentamos a un panorama logístico en constante cambio en el que tanto los consumidores como los clientes esperan un envío más rápido y una entrega más rápida. Para lograr esto, la flexibilidad es esencial. Aquí veremos, por qué.
Durante el proceso de la cadena de suministro, existen ciertas etapas en donde las circunstancias pueden cambiar de forma inesperada. Y es que, una cadena de suministro es una red tan vasta e intrincada que es fácil ver cómo y por qué ciertos aspectos de esa red cambian repentinamente. Por lo que, es importante poder adaptar nuestro enfoque.
Durante este proceso es fácil olvidar cuántos requisitos diferentes puede tener un equipo de logística al completar el pedido de un cliente. Cada consumidor es diferente, y nunca tratamos a uno igual que otro. En logística, tenemos que reconocer que las necesidades de cada cliente son distintas: Los diversos medios de transporte para entregar a distintos horarios, a los diferentes tipos de clientes forman parte integral de la industria, y para cumplir con este rango de necesidades, la flexibilidad es clave.
Aunque pueden surgir una gran variedad de cambios en las circunstancias, (algunos de ellos ni siquiera nos lo imaginamos, dada la logística especializada) si se tiene un enfoque flexible se pueden considerar distintas soluciones. Por ejemplo, podría ser que el camión de entrega se tuviera una falla estando en tránsito, esto supone un peligro para el tiempo de entrega. Sin embargo, con el enfoque flexible se pueden considerar soluciones como: llamar a la compañía para enviar otro y continuar con el stock, etcétera. Sin flexibilidad, estos bienes pudieron permanecer estancados por un tiempo, pero con la experiencia y conocimientos correctos se puede lograr la entrega del producto a tiempo.
En Promologistics, buscamos todos los días mantener un enfoque flexible en las estrategias que implementamos para nuestros clientes porque así como ellos satisfacen demandas diversas nosotros tenemos el compromiso de adaptarnos para ayudarlos a cumplir cada uno de esos objetivos.